En este post te daremos estrategias motivacionales para evitar que tu equipo de trabajo no se desmotive y se marche con la competencia

La formación y la experiencia de los trabajadores son factores fundamentales para el funcionamiento de cualquier empresa. Aunque, no son los únicos. La motivación del personal está intrínsecamente ligada a su productividad. Y estas a la permanencia en el equipo o a la búsqueda de nuevas oportunidades laborales en otras organizaciones.

Roberto Revuelta, Director Nexian Select&Talent, señala que “para obtener rentabilidad empresarial es capital no dejar a un lado la motivación del personal”. Y esa motivación puede conseguirse a través de estas estrategias motivacionales que valorarán el trabajo de tu equipo:

Aumento salarial

Un aumento del salario es una de las principales formas de recompensar el trabajo bien hecho por el personal de cualquier empresa. Dependiendo de la actividad comercial del negocio y de los resultados obtenidos, esta mejora salarial puede vincularse a la retribución fija, a la variable o a una flexible, sin olvidar la opción del reparto de beneficios.

Beneficios sociales y compensaciones

En caso de que la empresa no pueda ofrecer una mejora de la retribución económica, la opción de ofrecer beneficios sociales como bonos (cuyo importe está libre de impuestos) es una buena alternativa para la motivación de los empleados.

Promoción y ascenso

La promoción interna es un elemento motivador en el entorno laboral. Tanto para las personas que la reciben como para los compañeros que la consideran justa y ven en ella una opción de crecimiento en categoría en responsabilidad y por supuesto en retribución económica.

Funciones

Las funciones del equipo de trabajo son una de las formas más difíciles de equilibrar dentro de la organización. Hay que estar pendiente de las funciones de cada quien y no exigirles tareas que van mucho más lejos de las citadas en la definición de sus puestos de trabajo.

Trato

Saber tratar a los integrantes de tu equipo de trabajo es de suma importancia a la hora de saber qué se puede exigir a cada trabajador. Aunque el puesto de trabajo sea idéntico, no todas las personas que lo desempeñen lo harán de la misma forma. Habrá quienes necesiten más autonomía y otros una mayor guía en el cumplimiento de sus funciones.

Información y conocimiento

Informar e ilustrar al personal de la marcha de la empresa, de sus logros, dificultades y de sus objetivos, genera un mayor vínculo. Es una forma de hacerles más partícipes del negocio, sea éste el que sea y del tipo que sea, y de mostrarles que la empresa confía en ellos.

Refuerzo del trabajo en equipo

El “divide y vencerás” es un error al que muchos directivos recurren con la falsa creencia de que así sacarán lo mejor de cada empleado. Nada más lejos de la realidad. Aunque esa ecuación les funcione en el corto plazo, a largo plazo, esas luchas internas acaban por minar la moral de los empleados y casi siempre la de aquéllos que son más válidos en la organización. La conclusión es que muchos de ellos acaban marchándose en busca de mejores ambientes de trabajo.

Buen ambiente de trabajo

Es importante que los trabajadores perciban que en sus puestos de trabajo no sólo se exige cantidad, sino también calidad. De la misma forma, es fundamental que los colabores de cualquier empresa se sientan seguros en sus puestos para poder aportar ideas y soluciones a los posibles problemas que surjan en la empresa.